Cuando se habla de una libre decisión o libre albedrío que el hombre puede llegar a tomar sobre algún aspecto determinado, en realidad éste no se encuentra en una condición de libre voluntad, ya que su libertad de decisión en realidad se limita a un conjunto de cosas y tareas que se les han impuesto desde el inicio de su vida, pero que en realidad existen muchas otras circunstancias que debido a una falta de conocimiento verdadero, el hombre no tiene las opciones para saber elegirlas o no.
Esto es debido a que el hombre tiene una voluntad libre en un campo limitado de sus experiencias, pero puede existir siempre la situación en que el conocimiento del hombre pueda crecer más allá de los límites que alguna vez se le impusieron, con lo que la posibilidad de elegir se ampliarán también grandemente, haciendo que este hombre pueda tener una mayor independencia, esto debido a que su comprensión ha llegado a tener una creciente conciencia.
Algo que podemos relacionar a lo que se ha mencionado anteriormente, vendría a ser el caso que se conoce como «el libre albedrío» que es uno de los dones que llega a tener todo ser humano para poder decidir qué hacer en un momento determinado. Es de esta manera que al hombre no se le niega absolutamente nada, pues simplemente está en él la decisión de hacer algo bueno o malo, todo depende desde el punto de vista que para cada persona signifique cada una de estas acciones. Es justamente allí donde podemos hacer la analogía con lo que se ha mencionado antes, ya que dichas acciones que el hombre tiene la posibilidad de realizar a manera de un libre albedrío, están siempre limitadas acciones terrenales y nada más.
Pero si el hombre llegase a tener un conocimiento mayor, o mejor dicho a descubrir cómo despertar y manejar cada uno de los poderes ocultos que éste tiene en su interior, es que las opciones en ese libre albedrío vendrían a superar cualquier limitación que éste pueda imaginar; es así que con estos poderes, se podría llegar a controlar de una manera fácil el comportamiento del clima en un momento determinado, se pudiese hacer que llueva a voluntad en donde nunca ha habido una nube, hacer que inmensos mares se abran camino para que pueda pasar el hombre, o la mayor virtud que alguien pueda desear tener, sanar a quien haya caído en desgracia o inclusive hacer que un muerto vuelva a la vida.
Todas estas circunstancias implican una gran responsabilidad debido al nivel de poder que una persona puede llegar a tener; pero sólo es cuestión de recordar los pasajes de la historia para poder entender que éstos ya pasaron por determinados personajes importantes, quienes de una manera fácil y sencilla lograron realizar esas acciones bajó el asombro de quienes lo rodeaban.
Si es que estos poderes no han crecido de manera paralela con el conocimiento y el alma, el libre albedrío en cambio se dirigiría por el camino de la oscuridad falsa, pues lo que se ha mencionado antes de acuerdo al ocultismo, vendría a ser una oscuridad verdadera. Es por ello que cuando el hombre haya descubierto que tiene la capacidad para manejar estos poderes, es cuando en realidad estos se activarán de manera automática desde dentro de él.
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