El amor es uno de los sentimientos más sublimes y hermosos que somos capaces de sentir el ser humano. Dicen que el mundo se mueve gracias al amor. Un amor siempre pleno y entregado, un amor que ha de conducirnos por siempre a través de las sendas de la felicidad y de la plenitud… Por eso queremos que aprendas a realizar este hechizo de amor con una foto de la persona amada.
Y sin embargo a veces ocurre que amamos y no nos aman. No se sabe, en esencia, las razones por las que queremos o deseamos a una persona y al resto no. Se han esgrimido mil argumentos de naturaleza sociológica, moral, personal, física, incluso química, como resultado de las distintas reacciones de la dopamina en nuestro organismo. Sea como fuere, mostraremos aquí dos sencillos procesos de amarre para esas personas que, verdaderamente aman y no son amadas.
Si bien, conviene decir que la principal atracción de las personas radican en ellas mismas: las miradas, las actitudes, la seguridad en uno mismo, incluso la afinidad con la otra persona pueden ser importantes armas de seducción y enamoramiento; pese a todo, si quieres que tu potencial amante se sienta atraído por ti, plasmaremos en adelante un par de hechizos de amarre a partir de una fotografía.
Hechizo de amor con una foto
Es importante el uso de la fotografía por cuanto de simbólico tiene el acto. Hoy día es relativamente sencillo tener una foto de la persona que amamos, ya que existen recursos como internet, o el Facebook o nuestro propio teléfono móvil para realizar una fotografía de esa persona. Es importante, para que el hechizo funcione que solo aparezca la persona implicada en el conjuro o, en todo caso, tú y ella, nadie más.
Para este primer caso vamos a necesitar los siguientes objetos:
- Una foto de nosotros
- Una foto de la persona que queremos enamorar
- Una vela roja
- Un lápiz o marcador.
El hechizo debe realizarse durante la noche, a ser posible con luna llena y realizarlo en una sala silenciosa y tranquila. Para este tipo de hechizos, y para todos los demás, es esencial el contexto en el que se realiza el rito, ya que la paz y el silencio nos ayuda a concentrarnos y a atraer las buenas vibraciones.
Una vez tenemos delimitado un espacio apropiado, puede ser nuestra habitación, por ejemplo, ya que está impregnada de nuestra energía y también de la energía de los sueños. Una vez tenemos el lugar, sin más luz que la de la luna entrando por nuestra ventan,en la parte posterior de la imagen de la persona que queremos enamorar, deberemos escribir “Te amo” y en la parte delantera, justo delante de la imagen de nuestro amado, deberemos escribir “Tu me amas” Una vez realizado este acto debemos encender la vela roja y esta vez, a la luz de dicha vela, debemos mirar ambas fotos y visualizarnos los dos juntos en la vida real, realizando las actividades que cada día hacemos. Acto seguido deberemos inclinar la vela sobre ambas fotos, la nuestra y la de nuestro ser amado, con el amarre que acabamos de escribir, y dejar que gotee sombre ambas imágenes unas cuanta gotas de cera en el frontal, acto seguido deberemos pegarlas, cara con cara.
Para que este amarre o hechizo de amor funcione, debemos susurrar la siguiente letanía tres o cuatro veces a lo sumo:
Eran dos y ahora son una,
juntos como la tierra y la luna.
Dejaremos la vela encendida unos minutos más. Y al cabo de un tiempo (10 o 12 minutos) colocaremos las dos fotos, ahora una, pegadas por la cera roja y con la invocación de nuestras plegarias, bajo nuestra almuhada. Deberemos dormir con las fotos en ese lugar hasta el siguiente ciclo de luna y esa persona caerá preso de un incontenible amor gracias a que deparará en tantas cosas hermosas y bellas que cada uno poseemos.
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