Iniciación a la Ouija

La ouija, como todos sabemos, es una manera más, de las muchas existentes, de comunicarse con entidades o seres que están en otra dimensión. Quizá la enorme popularidad de este medio radica en su facilidad de uso y en la escasa preparación y experiencia que el método requiere de los participantes. Es por lo tanto un medio para lograr una comunicación con espíritus o seres de otras dimensiones. En este artículo te vamos a enseñar todo que debes saber para tu Iniciación a la Ouija.

Etimológicamente, el término oija viene del termino oui,  (sí, en francés) y ja (sí, en alemán); vienen a significar una rotunda afirmación a la pregunta  con la que se suele empezar esta serie de sesiones: ¿Estás ahí?

Formalmente, la Ouija es un tablero, lo normal es que sea de madera de caoba, en el que se graban todas las letras del alfabeto y los números del 0 al 9. También podemos encontrar expresiones sí, no y adiós. Aunque esto es adaptable a las distintas mentalidades y usos lingüísticos de cada cultura y país.

Este tipo de sesiones suelen requerir lugares tranquilos, alrededor de una mesa redonda y no menos de cuatro personas, también se puede utilizar lugares especiales como cementerios, o casas donde han ocurrido algún hecho luctuoso, como medio de comunicación segura con las entidades que han quedado en estos lugares.

Los participantes deben tener un mínimo de seguridad y confianza, jamás deben acudir a una sesión e Ouija con miedo o tomarse este tipo de actividades como broma. También cabe la posibilidad de que asistan observadores.

Aunque se puede realizar de manera sencilla y por cualquier persona, lo aconsejable es que siempre se realice con alguna persona experimentada y que domine en todo momento la situación.

Iniciación a la Ouija: preparación

La preparación para la actividad es sencilla. Hay quienes purifican el ambiente con incienso o plantas aromáticas, otros invocan a los ángeles para que sirvan de protección contra las malas presencias y posibles contactos ya que, cuando iniciamos una sesión de Ouija nadie sabe qué tipo de entidad puede ser contactada, esto debemos tenerlo muy claro en nuestra iniciación a la Ouija.

Tras unos minutos de relajación, y en un contexto adecuado, como el que hemos descrito anteriormente, la sesión se suele comenzar con la pregunta ¿hay alguien ahí? En caso de que no ocurra nada, deberemos esperar y a los pocos minutos volver a realizar la pregunta. Es imprescindible, repito, la concentración de las personas y la tranquilidad del contexto, no debe existir ningún tipo de perturbación.

Puede ocurrir que la tablilla que reposa sobre las letras comience a moverse, es el primer síntoma de que algo o alguien está respondiendo a nuestras preguntas. Los dedos unidos y sobre dicha tablilla no llegarán a tocarla, para evitar que sea movida de manera consciente o inconsciente por nosotros mismos. Deberán ser preguntas, las que se realicen, serías y meditadas y evidentemente, no molestar ni enfadar a la entidad contactada. Se recomienda no realizar preguntas personales ni al respecto de lo que le ocurrió en vida a tal entidad o cuestiones de  otras personas vivas, aunque no estén participando en la sesión.

Es cierto que la Ouija no tiene buena fama, para muchos es un llamamiento a seres oscuros y perniciosos, abrir una puerta al mal y poner en peligro nuestras propias vidas, quizá ello sea cierto, pero también es verdad que este tipo de actos se han realizado, en los últimos tiempos, por personas neófitas y sin experiencia. Existe otra visión positiva de este tipo de comunicación, para aquellos que han perdido algún ser querido y quiere contactar con él, más allá de los posibles fraudes en relación a esta actividad, es y será siempre un método polémico y a veces peligroso, si no se sabe hacer, pero es también una esperanza para aquellos que se quedaron sin su ser querido y  les faltaron unas palabras por decirse.