Crear abundancia no depende del azar o del destino, es un estado permanente al que todos podemos acceder programando correctamente nuestros pensamientos. Si creemos que vivir en la abundancia es nuestro estado natural, esta aparecerá en nuestra vida.
La pregunta sería ¿Cómo podemos crear un estado mental de abundancia para que ser refleje en nuestra vida? El proceso mediante el cual abrimos nuestra mente para permitirnos aceptar todo lo que el universo nos ofrece es un aprendizaje y como tal requiere tiempo. Se ha dividido los conceptos que necesitan aprenderse en pasos que se identifican con algunas letras del abecedario con el objetivo de facilitar su asimilación.
- La letra A representa lo absoluto, la autoridad, la afluencia, la abundancia. Significa que la esencia del ser humano, su naturaleza es infinita. Tenemos acceso a todas las posibilidades, es decir, somos nosotros los que elegimos vivir o no en la abundancia.
- La letra B representa lo bueno. Tenemos la posibilidad de mejorar cada día hasta obtener lo bueno, lo mejor de todas las cosas. Merecemos lo mejor, sólo hay que pedirlo y estar dispuesto a aceptarlo.
- La letra C representa la calma y la caridad. Para explicarlo mejor, se puede tener millones de dólares en el banco y sin embargo estar preocupado, tener miedo pensando en que podemos perderlo. La abundancia es un estado mental mediante el cual entendemos que por naturaleza nada puede faltarnos y lo compartimos con los demás porque entendemos que la fuente es inagotable, el dar no nos hace más pobres. Si tenemos dinero pero nos falta la calma y la confianza en el futuro seguimos siendo pobres.
- La D representa el Dharma, cada ser humano sobre la tierra tiene un propósito en la vida. Es una ley del universo que cuando estamos en nuestro Dharma, cuando estamos cumpliendo el propósito para el que fuimos creados nada nos faltará porque siempre habrá gente que necesitará o estará interesada en lo que hacemos. Por otra parte el cumplir con nuestro Dharma nos da felicidad y plenitud.
- La E representa la esperanza, confiar en que nuestras acciones obtendrán el mejor resultado no solamente nos asegura que así será sino que además nos brinda alegría durante el proceso. Somos felices al obtener el resultado que buscamos pero además lo somos mientras estamos buscándolo.
- La F representa el fracaso pero no como una derrota sino como una situación en la que potencialmente se encuentra la semilla, la posibilidad del éxito. Se trata de un cambio de perspectiva, en realidad no existe el fracaso, lo que usualmente llamamos fracaso es una posibilidad que nos permite realizar las cosas bien.
- La G representa la gratitud. Se trata de estar agradecidos a Dios y al universo por la generosidad que nos brinda. Abandonarnos, entregarnos confiadamente al todo sabiendo que el todo nos protegerá y sentir una enorme gratitud por ello. El agradecimiento fortifica nuestro espíritu, nos brinda serenidad y alegría.
Cuando incorporemos todas estas claves en nuestra conciencia y aprendamos a vivir y a pensar de acuerdo a ellas, la riqueza no tardará en aparecer en nuestra vida.
Asimilando este concepto podremos situarnos en un estado mental perfecto para crear abundancia para nosotros y para nuestro entorno.
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