Cuando vemos el comportamiento que está empezando a tener la Tierra en los últimos años, es cuando podemos evidenciar que la Tercera Profecía de los mayas se está haciendo realidad, pues fueron ellos quienes dijeron que la Tierra sufriría de un calentamiento global excesivo y sin precedentes que afectaría de muchas maneras a nuestro planeta.
La temperatura del planeta llegará a ún nivel demasiado alto, pudiendo decirse que son olas de calor las que sufrirá la humanidad. A pesar de que éste es un factor muy puntual, viene a ser demasiado importante en el comportamiento del clima en el planeta, pues existirán muchos cambios geológicos debido a esta alteración de temperatura. Para los mayas, la causa principal para que el planeta sufra de un excesivo calentamiento, está en la falta de armonía y equilibrio que el hombre guarda con la naturaleza, lo que se ve evidenciado en cada una de las explotaciones que el hombre hace con tal de enriquecer su ambición de poder.
Para otros expertos, en cambio, este calentamiento sería ocasionado por las diferentes vibraciones solares que de manera directa afectan a la Tierra. Sea lo uno o lo otro, la situación es que la Profecía maya menciona que estos cambios climatológicos tendrán una incidencia importante en la sociedad. Esto ya puede verse en muchos países del mundo donde debido al calentamiento de algunas regiones, existe falta de agua por la escasez de lluvias. Esto provoca también determinados problemas para aquellos países que dependen de otros en materia energética, y peor aún en aquellas zonas casi abandonadas, pues ahora serán totalmente dejadas de lado, al no tener la posibilidad de acceder a este recurso básico para la vida que es el agua.
Esta falta de armonía del hombre con la naturaleza es lo que los mayas trataron de advertirnos en su tercera profecía, diciéndonos que respetemos un poco más aquellos recursos que están agotándose y que no volverán a generarse. El mantener y preservar la ecología en el planeta es uno de los factores que podría dar una nueva esperanza de vida para la humanidad. Así como existen muchos países que se esfuerzan en extraer el oro negro de las pocas regiones que aún conservan éste recurso energético, existen otras naciones que tratan de apoyar que dicha explotación no se realice.
Buscar el bien colectivo y no el individual es una de las soluciones que se debe de pensar y adoptar, poniendo en cada una de nuestras acciones el interés por mejorar el entorno en donde vivimos. La humanidad debe mejorar a base de la ciencia y el conocimiento, encontrando formas alternativas de generación de energía, para así dejar descansar a este planeta que tan agotado se encuentra. Seguramente los mayas supusieron que esto pasaría. Los mayas consideraron que al llegar este período de tiempo, los seres humanos no debían de postergar para más tarde una acción renovadora en la actitud del hombre, pues de allí parte todo. Si las ambiciones personales se dejan de lado, seguro que el planeta y por tanto la humanidad, tendrán una nueva esperanza para vivir y evolucionar.
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